La nicotina es un estimulante alcaloide ampliamente utilizado y que se produce de forma natural en la familia de plantas solanáceas (sobre todo en el tabaco). Se utiliza para dejar de fumar y aliviar los síntomas de abstinencia. La nicotina actúa como agonista de los receptores en la mayoría de los receptores nicotínicos de acetilcolina (nAChR), excepto en dos subunidades de receptores nicotínicos (nAChRα9 y nAChRα10), donde actúa como antagonista de los receptores. La nicotina constituye aproximadamente entre el 0,6 y el 3,01 TP3T del peso seco del tabaco. La nicotina también está presente en concentraciones de millonésimas de un por ciento en la familia comestible de las solanáceas, incluidas las patatas, los tomates y las berenjenas, aunque las fuentes no están de acuerdo sobre si esto tiene algún significado biológico para los consumidores humanos. Funciona como una sustancia química antiherbívora; en consecuencia, la nicotina se utilizó ampliamente como insecticida en el pasado, y los neonicotinoides, como el imidacloprid, se utilizan ampliamente.
El uso de nicotina como herramienta para dejar de fumar tiene un buen historial de seguridad. La nicotina en sí misma está asociada con algunos daños a la salud. La nicotina es potencialmente dañina para quienes no la consumen. En pequeñas cantidades, tiene un efecto analgésico leve. El Director General de Servicios de Salud de los Estados Unidos indica que la nicotina no causa cáncer. Se ha demostrado que la nicotina produce defectos de nacimiento en algunas especies animales, pero no en otras. Se considera un teratógeno.
La adicción a la nicotina puede no parecer tan dañina como muchas otras adicciones. Esto se debe probablemente a que los productos de tabaco son legales y fáciles de conseguir, y los peores efectos secundarios de su abuso tardan en manifestarse. El consumo de tabaco se cobra más vidas que cualquier otra sustancia adictiva. Muchos fumadores no pueden dejar de fumar a pesar de conocer el impacto del tabaco en su salud. Querer dejar de fumar pero no poder es un signo revelador de adicción.